El dolor constante en la ingle puede ser realmente preocupante. Cuando lo consigues, es natural preguntarse si algo grave podría estar pasando.
Si bien no todos los casos de dolor en la ingle indican un problema grave, es crucial ser consciente de lo que podría estar causándolo. Y una de las causas más comunes de dolor en la ingle son las ETS.
En esta publicación de blog, exploraremos las diversas ETS que pueden causar dolor en la ingle. También discutiremos otras posibles causas, asegurándonos de que tenga una comprensión completa de este síntoma complejo.
Empecemos.
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Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), también conocidas como infecciones de transmisión sexual (ITS), son un grupo de infecciones que se transmiten principalmente a través del contacto sexual. Estas infecciones pueden ser causadas por una variedad de patógenos, incluidas bacterias, virus y parásitos.
Algunas ETS pueden provocar complicaciones graves si no se tratan, como la enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), la infertilidad, las complicaciones en el parto e incluso ciertos tipos de cáncer.
El dolor en la ingle puede referirse a la molestia o el dolor que se experimenta en el área donde el abdomen se encuentra con la parte superior de los muslos. Esta área se conoce como la región de la ingle.
El dolor en la ingle puede variar desde un dolor sordo hasta un dolor agudo e intenso, y puede localizarse o irradiarse a otras áreas como la parte interna de los muslos, la parte inferior del abdomen o la región genital.
No dejes que la idea de tener una ITS afecte tu tranquilidad.
El dolor en la ingle sigue siendo uno de los síntomas más comunes de ciertas ITS. Estas son algunas ITS que pueden causarlo.
La clamidia, una enfermedad de transmisión sexual común causada por la bacteria Chlamydia trachomatis, puede causar dolor en la ingle.
En algunos casos, las personas con esta infección bacteriana pueden experimentar dolor en la parte inferior del abdomen o en la zona pélvica. Este dolor puede variar desde una molestia leve hasta un dolor más intenso y persistente.
El dolor que se experimenta durante esta infección a menudo es causado por la inflamación y la hinchazón causadas por la respuesta del sistema inmunitario a la infección. Una mujer infectada con clamidia también puede experimentar dolor si su infección no se trata y conduce a la EIP.
El dolor en la ingle asociado con la clamidia puede ir acompañado de otros síntomas, como secreción vaginal o peneana anormal, dolor al orinar y sangrado entre períodos o después de las relaciones sexuales en las mujeres.
La gonorrea, otra infección de transmisión sexual (ITS) común, también puede causar dolor en la ingle en ciertos casos. Durante una infección por gonorrea, la bacteria Neisseria gonorrhoeae infecta el tracto urinario, causando inflamación, dolor e hinchazón en los genitales y el área de la ingle.
En los hombres, la infección puede propagarse desde la uretra hasta el epidídimo (el tubo que transporta los espermatozoides desde los testículos), causando una afección conocida como epididimitis. Esto puede provocar dolor e hinchazón en el área de la ingle, así como sensibilidad en los testículos.
Del mismo modo, en las mujeres, la gonorrea no tratada puede extenderse a las trompas de Falopio y causar enfermedad inflamatoria pélvica (EIP), que puede presentarse con dolor en la ingle o en la parte inferior del abdomen.
El micoplasma es una enfermedad de transmisión sexual que puede causar infecciones genitales tanto en hombres como en mujeres.
En algunos casos, las personas infectadas con Mycoplasma pueden experimentar dolor en la ingle como síntoma. Este dolor puede variar desde una molestia leve hasta un dolor más intenso y persistente en la ingle o la zona pélvica.
Al igual que la clamidia y la gonorrea, las bacterias Mycoplasma infectan el tracto urinario, provocando la inflamación y el dolor en los genitales y la ingle.
El ureaplasma es otra infección bacteriana que puede provocar dolor en la ingle.
Al igual que la clamidia, la gonorrea y el micoplasma, una infección por ureaplasma puede provocar epididimitis en los hombres y EIP en las mujeres, junto con otros problemas de fertilidad.
El herpes es una infección viral bien conocida que puede causar una variedad de síntomas, incluido el dolor en la ingle en algunos casos.
El herpes genital, causado con mayor frecuencia por el virus del herpes simple tipo 2 (VHS 2), puede provocar llagas dolorosas o ampollas en el área genital, que incluye los genitales, el ano, la parte superior de los muslos y la ingle.
Durante un brote inicial de herpes, las personas pueden experimentar un dolor intenso en la ingle acompañado de la aparición de ampollas o lesiones dolorosas. Este dolor puede ser intenso y puede irradiarse a la parte interna de los muslos o a la parte inferior del abdomen.
Incluso durante brotes recurrentes, algunas personas pueden experimentar un dolor o malestar más leve en la ingle.
La sífilis, una ITS causada por la bacteria Treponema pallidum, puede presentarse con muchos síntomas, incluido el dolor en la ingle.
Durante la etapa secundaria de la sífilis, que generalmente ocurre varias semanas o meses después de la infección inicial, las personas pueden desarrollar una erupción cutánea, fiebre e inflamación de los ganglios linfáticos.
En algunos casos, esta etapa también puede ir acompañada de dolor en la ingle con ganglios linfáticos inguinales inflamados en la ingle.
El dolor inguinal asociado con la sífilis puede ser sordo o doloroso y puede ir acompañado de otros síntomas como fatiga, dolor de garganta, glándulas inflamadas y dolores musculares.
No necesariamente.
La mayoría de las ETS son completamente asintomáticas, lo que significa que no producirán ningún síntoma perceptible.
En otros casos, pueden causar algunos síntomas que ni siquiera se notan.
En otros casos, pueden causar solo uno o dos síntomas que pueden confundirse fácilmente con otras infecciones y afecciones.
Cada persona experimenta cada infección de manera diferente. Es por eso que la decisión de hacerse la prueba no debe basarse en los síntomas que experimentó, sino en las acciones que tomó.
No dejes tu salud sexual al azar. Hazte la prueba de ITS hoy mismo.
Si una ETS está causando dolor en la ingle, es probable que la hayas contraído a través de la actividad sexual sin protección.
Sin embargo, puedes contraer ITS de otras maneras:
Si bien el dolor en la ingle puede ser causado por una ITS, algunas otras cosas podrían estar causándolo.
Aquí hay una lista (no exhaustiva) de posibles causas.
El área de la ingle alberga varios músculos importantes, incluidos los músculos aductores, que son responsables de juntar las piernas. Estos músculos pueden tensarse o sobrecargarse debido al ejercicio intenso, los deportes que implican movimientos laterales rápidos o los cambios bruscos de dirección.
Cuando estos músculos están tensos, las personas pueden experimentar dolor en la ingle que va desde una molestia leve hasta un dolor intenso y agudo, particularmente durante los movimientos que implican estirar o contraer los músculos afectados.
Una hernia ocurre cuando una parte interna del cuerpo, como una parte del intestino o el tejido abdominal, sobresale a través de una debilidad o abertura en la pared muscular o de tejido circundante.
Las hernias pueden ocurrir en la región de la ingle, donde se conocen como hernias inguinales. Estas hernias pueden causar una protuberancia o hinchazón, acompañada de dolor o molestias, especialmente al toser, esforzarse o levantar objetos pesados.
El dolor asociado con una hernia inguinal puede ser sordo o doloroso, o puede ser agudo e intenso, dependiendo de la gravedad de la afección.
A medida que los cálculos renales viajan a través del tracto urinario, pueden alojarse en los uréteres, los conductos que conectan los riñones con la vejiga. Cuando esto sucede, puede provocar un dolor intenso en la zona de la ingle, así como en la parte inferior del abdomen o la espalda.
La osteoartritis afecta principalmente al cartílago que amortigua las articulaciones, lo que lleva a su descomposición gradual con el tiempo.
Cuando la osteoartritis afecta a la articulación de la cadera, puede provocar dolor en la ingle debido a la proximidad de la articulación a la zona de la ingle. A medida que el cartílago se desgasta, los huesos pueden comenzar a frotarse entre sí, causando inflamación, rigidez y dolor.
La torsión testicular ocurre cuando el testículo gira, retorciendo el cordón que lleva la sangre al testículo. Esto puede causar dolor repentino e intenso en la ingle o el escroto, a menudo acompañado de hinchazón, náuseas y vómitos.
Si no se trata, la torsión testicular puede provocar la pérdida del testículo afectado debido a la falta de suministro de sangre.
El dolor en la ingle puede ser un síntoma preocupante con muchas causas potenciales, desde ETS hasta otras afecciones médicas.
Si experimenta un dolor persistente o intenso en la ingle, es crucial buscar atención médica para determinar la causa subyacente. Los análisis de orina, hisopo y sangre confiables y confidenciales de Better2Know le brindarán las respuestas que necesita, lo que le permitirá tomar las medidas necesarias para un tratamiento y cuidado adecuados.
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