Concebir puede ser muy difícil para muchas personas y parejas. Hay todo tipo de condiciones y elecciones de estilo de vida que pueden dificultar la capacidad de quedar embarazada.
Las infecciones de transmisión sexual (ITS) pueden afectar seriamente tu fertilidad. Pero hay una infección que no muchas personas pueden considerar una preocupación seria por los problemas de fertilidad.
En los últimos años se han realizado muchas investigaciones sobre el efecto que el VPH puede tener en la fertilidad. ¿Deberías preocuparte?
Sigue leyendo para descubrirlo.
El VPH es la ITS más común en el mundo. Si crees que tienes verrugas genitales o una infección por VPH, hazte la prueba en casa con el kit de prueba casera de VPH de Better2Know.
Si quieres entender cómo el VPH puede afectar tu fertilidad, tienes que entender qué es.
El Virus del Papiloma Humano (VPH) es un virus que generalmente se transmite entre personas a través del contacto sexual. Si bien los principales modos de transmisión son a través del sexo vaginal, anal y oral, también es posible contraer el VPH a través del contacto piel con piel, como tocar los genitales de una pareja sexual durante los juegos previos.
El VPH es la ITS más común en el mundo porque se transmite fácilmente de una persona a otra. De hecho, la mayoría de las personas a lo largo de su vida contraerán algún tipo de VPH. En la mayoría de los casos, estas infecciones son inofensivas y son eliminadas por el sistema inmunitario sin producir ningún síntoma. Sería correcto decir que tener VPH es prácticamente una parte normal del ser humano.
Sin embargo, hay casos en los que el VPH puede causar síntomas (notamos algo en nuestro cuerpo) u otros problemas de salud sin síntomas.
El síntoma más común que experimentan las personas del VPH son las verrugas genitales, pequeñas protuberancias carnosas que pueden aparecer en los genitales o alrededor del área de la ingle. Varían en color según el tono de la piel y no producen sensaciones adversas como picazón o ardor.
En algunos casos muy raros, las verrugas genitales pueden crecer hasta un tamaño tal que pueden dificultar las relaciones sexuales o el parto.
Pero en su mayor parte, las verrugas genitales son bastante benignas para las personas que las experimentan. No amenazan su salud si son antiestéticos, y se pueden eliminar con cremas tópicas, congelación o cirugía. Pero la mayoría de los casos de verrugas genitales desaparecen por sí solos después de unos seis meses a dos años.
Las verrugas producidas por el VPH suelen ser causadas por las cepas benignas del virus. Pero hay otras cepas de VPH que pueden ser más problemáticas debido a su relación con ciertos tipos de cáncer.
14 cepas de VPH de alto riesgo, en particular el VPH 16 y el VPH 18, son responsables del 3% de los cánceres en las mujeres y del 2% de los cánceres en los hombres. El VPH de alto riesgo es responsable del 99% de los cánceres de cuello uterino y del 60% de los cánceres de pene. El virus también puede causar otros cánceres en la cabeza y el cuello. Sin embargo, al igual que las cepas de “verrugas”, la situación habitual es que su cuerpo expulsará el virus por sí solo después de unos años sin convertirse en cáncer. Es una pequeña minoría la que corre el riesgo de sufrir complicaciones más graves.
Pero el virus del VPH, al parecer, no se conforma con solo causar verrugas y cánceres…
Si bien es ampliamente aceptado que las ITS como la clamidia y la gonorrea pueden tener efectos adversos sobre la fertilidad (incluida la enfermedad inflamatoria pélvica en las mujeres y la epididimitis en los hombres), se han recopilado menos datos sobre los efectos que el VPH puede tener en las personas que intentan quedar embarazadas.
Sin embargo, con una mayor conciencia pública de los efectos del virus en la salud en general, se está prestando más atención a este virus. Y varios estudios publicados en los últimos años pintan un panorama complejo de los efectos que este virus puede tener en la fertilidad.
Muchas mujeres, sin duda preocupadas por los conocidos vínculos del VPH con el cáncer de cuello uterino, están preocupadas por el efecto que el virus puede tener en su fertilidad. Si bien no existe una asociación entre la vacunación contra el VPH y la infertilidad, algunos estudios sugieren que tener ciertas cepas de VPH puede reducir las tasas de fertilidad en las mujeres.
Un estudio realizado en 2015 encontró que la presencia de ciertas cepas de VPH puede dificultar que un embrión se implante en la pared del útero o el útero. Las infecciones por VPH también pueden dañar el embrión en sí.
Otro estudio publicado en The Journal of Infectious Diseases en 2020 encontró una correlación significativa entre las infecciones por VPH y los nacimientos prematuros y la ruptura prematura de membranas. La infección también se asoció con restricción del crecimiento intrauterino, bajo peso al nacer y muerte fetal. También existe una relación entre las infecciones cervicales por VPH y la pérdida del embarazo.
Por supuesto, el tratamiento del cáncer de cuello uterino en sí mismo también puede afectar la capacidad de una mujer para concebir. Muchos tratamientos para el cáncer de cuello uterino implican una histerectomía (extirpación de la matriz). Los tratamientos de radioterapia para el cáncer de cuello uterino también pueden afectar negativamente al útero y a los ovarios. Sin embargo, algunos tratamientos para el cáncer de cuello uterino temprano pueden afectar la fertilidad relativamente poco, como las biopsias de cono o las traquelectomías radicales.
Sin embargo, a pesar de todo esto, es vital recalcar que se necesita más investigación en esta área, y se han llegado a muy pocas conclusiones definitivas sobre cómo el VPH puede afectar la fertilidad en las mujeres.
Debido a años de mensajes sobre los peligros que el VPH puede tener en la salud de las mujeres, es posible que muchos hombres no estén tan preocupados por los efectos que el VPH puede tener en su salud. Sin embargo, existen datos significativos para asociar la infertilidad masculina con la infección por VPH.
Muchos estudios sugieren que las infecciones por VPH pueden afectar negativamente la calidad del esperma, lo que hace que la inseminación sea menos probable. Este virus puede unirse a la cabeza del espermatozoide, disminuyendo la calidad de la movilidad. Los hombres con problemas de fertilidad tienen de 3 a 4 veces más probabilidades de tener el VPH. Las cepas particulares de VPH se correlacionaron con problemas de fertilidad masculina, sobre todo (en orden descendente) VPH 45, 16, 52, 18, 59 y 13. (Hay que subrayar que se trata de una asociación y no de una relación causal).
Sin embargo, al igual que con los problemas de fertilidad en las mujeres, se necesita más investigación para establecer aún más la conexión entre las infecciones por VPH y la fertilidad masculina.
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Si está embarazada y tiene el VPH, puede transmitirlo a su bebé durante el parto o el embarazo. Sin embargo, la mayoría de los bebés que contraen el VPH en el útero eliminarán la infección sin incidentes. En casos muy raros, el VPH puede causar verrugas genitales en el bebé, que se pueden extirpar con cirugía.
Como se indicó anteriormente, no existe una relación entre la vacunación contra el VPH y la infertilidad.
De hecho, la vacunación puede aumentar la probabilidad de concepción para muchas parejas, ya que la vacuna proporciona una protección eficaz contra las cepas del VPH que se han relacionado con el cáncer y la infertilidad.
La mejor manera de evitar contraer el VPH en primer lugar es recibir la vacuna contra el VPH. Si lo haces, te protegerás contra algunas cepas de alto riesgo. También puede proporcionar protección contra otras cepas de bajo riesgo que pueden causar verrugas genitales y están relacionadas con la infertilidad.
La vacuna se ofrece habitualmente a las niñas que no han comenzado su vida sexual, y en algunos países también se ofrece a los niños. Sin embargo, la vacuna sigue siendo eficaz en personas que ya han comenzado a tener relaciones sexuales y ofrece cierta protección hasta los 30 años. Por lo tanto, no es necesario ser un adolescente para vacunarse.
La siguiente mejor manera de evitar contraer el VPH es practicar sexo seguro. Esto implica el uso de métodos de barrera como condones y barreras dentales cuando se participa en la actividad sexual. También puede considerar limitar a sus parejas sexuales para reducir su nivel de exposición.
Debido a que el VPH es tan común, todos los países tienen directrices nacionales sobre el control del VPH. Las mujeres mayores de 30 años y las que han cambiado de pareja deben hacerse una prueba de frotis y verificar su estado de VPH. Cualquier resultado positivo será monitoreado cuidadosamente para asegurarse de que no haya consecuencias de tener el virus.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la mayoría de las personas contraerán algún tipo de VPH a lo largo de su vida, y la mayoría de las infecciones son completamente inofensivas y son eliminadas por el sistema inmunológico sin incidentes.
Si quieres proteger tu salud sexual y tu fertilidad, también debes tomar medidas para protegerte de otras ITS. Las ITS que pueden afectar negativamente tu fertilidad incluyen:
Puedes evitar contraer estas infecciones y proteger tu fertilidad practicando sexo seguro y haciéndote pruebas periódicas de ITS si eres sexualmente activo.
El VPH se ha relacionado con ciertos tipos de infertilidad. Para protegerse, vacúnese, hágase pruebas de Papanicolaou con regularidad y practique sexo seguro.
No dejes tu salud sexual al azar. Hacerse la prueba y recibir tratamiento temprano para las ITS puede ayudarte a mantener tu fertilidad y evitar los peores efectos de una infección.
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